Si quieres conocer cuáles son los pasos de constitución de una empresa, posiblemente te encuentres considerando abrir tu propio negocio, y deseas que sea un proyecto duradero y exitoso. Por eso debes saber de antemano, que iniciar un negocio implica planificar, tomar decisiones financieras y llevar a cabo una serie de actividades legales.
Por eso, es importante conocer los pasos para la constitución de una empresa. Es que, la tarea de constituir una empresa, lleva una serie de condiciones que debemos lograr para asegurar su mantenimiento y su éxito sostenido en el tiempo.
Los 10 pasos para constituir una empresa
Todas las empresas pasan por etapas que hacen parte de su “Quehacer operativo”. Desde que se tiene la idea de iniciar un negocio, hasta su expansión o posible cierre. A continuación, los 10 pasos esenciales en la constitución de una empresa:
Es un paso clave para recopilar información sobre los clientes potenciales y las empresas que ya operan en la zona.
El plan de negocio es la base de la empresa. Es una hoja de ruta sobre cómo estructurar, dirigir y hacer crecer la empresa.
Este plan de negocio ayudará a calcular la cantidad de dinero necesario para poner en marcha la empresa.
Un aspecto clave a la hora de crear una empresa en España es que todos los negocios deben llevar a cabo su contabilidad según lo que indica el Código de Comercio, es decir, deberán elaborar los siguientes documentos: libro Diario y libro de Inventarios y Cuentas Anuales.
Esos libros se pueden presentar, de manera digital, en el Registro Mercantil de la provincia en la que está inscrita la sociedad.
Elegir la ubicación de la empresa implica no solo la decisión de dónde quedará situado el negocio, sino también el tipo de negocio, si es físico o virtual.
Existen varios tipos de sociedades mercantiles (limitada, anónima, cooperativa, entre otras). Además, dependiendo del capital del que se dispone y de la cantidad de personal que va a trabajar en ella, se requerirá cierto valor. Por ejemplo para una sociedad anónima se requerirían 60.000 euros.
Es importante que el nombre de la empresa sea original y que no esté siendo utilizado por otra persona. Además, es necesario realizar el registro en el Registro Mercantil Central.
Para poder identificar la empresa a efectos fiscales, se requiere un número de identificación (NIF), el cual se deberá solicitar antes de cualquier movimiento de la empresa.
El Administrador de la sociedad debe darse de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) como autónomo societario.
Además, si vas a contratar trabajadores, debes dar de alta la empresa en Seguridad Social. También te asignarán un número, que es el código de cuenta de cotización (CCC). Por último, cada trabajador debe ser dado de alta en la Seguridad Social. Y firmarás un contrato de trabajo (hay diferentes modalidades: tendrás que elegir una).
Dependiendo de tu actividad, es posible que a la hora de crear una empresa tengas que inscribirla en algún registro, por ejemplo: bares, cafeterías, restaurantes, talleres de reparación, instalaciones eléctricas o de gas, entre otras. Cada una de estas actividades deben cumplir normas muy concretas. Además, según tu sector de actividad, es posible que necesites licencias específicas, que deberás consultar a tu Comunidad Autónoma y / o tu Ayuntamiento.
¿Cuáles son las metas que persigue una empresa?
Obtener el mayor beneficio posible: los socios no arriesgarían su capital ni emplearían su tiempo en una actividad que estuviera llena de riesgos e incertidumbre.
Garantizar la supervivencia: anticiparse a los cambios del entorno y adaptar su oferta a las necesidades del mercado son estrategias especiales que aseguran su continuidad.
Crecer: las empresas luchan por ser grandes y fuertes para ser competitivas. Por eso, tratan de cuidar a sus clientes, de conquistar a nuevos consumidores, expandirse a otras áreas geográficas o iniciar nuevas líneas de negocio.
Generar beneficios no económicos: más allá de los beneficios económicos, la empresa busca mejorar su reputación social o contribuir a un mayor desarrollo social.
También, de manera indirecta, la empresa alcanza otras finalidades, más de tipo social, ya que genera puestos de trabajo, abastece a la población con productos y servicios necesarios, paga impuestos y favorece el desarrollo de otros negocios, como proveedores, distribuidores y servicios complementarios para los empleados (restaurantes, transporte, etc.). Por eso, se dice que las empresas son fuente de riqueza.
Las implicaciones de mantener una empresa en funcionamiento tienen que ver con su liquidez para cumplir con obligaciones financieras, relacionadas con el dinero para comprar materias primas, cubrir los gastos diarios y pagar los empleados, entre otras. Por ese motivo, una empresa requiere tener efectivo suficiente para continuar con sus operaciones y poder mantener su actividad por un periodo de tiempo razonable.
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Si tienes consultas sobre los pasos para la constitución de una empresa, no dudes en contactarnos. Puedes hacerlo rellenando nuestro formulario de contacto, o llamando al número 629 57 20 09 (Manresa), o al 629 57 20 09 (Vilanova i la Geltrú). ¡Estaremos encantados de atenderle!